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| AFP-Texto Original |
Martes 24 de Mayo de 2011
La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) consiguió que la Organización Mundial de la Salud adoptara este martes varios proyectos de resolución que toman en cuenta sus prioridades, y lo consolidan como grupo diplomático autónomo e independiente en el concierto de la OMS.
"Enfermedades crónicas no transmisibles, combate a los productos médicos falsificados, reducción de la mortalidad neonatal, aplicación del Reglamento Sanitario Internacional y una asignación justa en el presupuesto de la OMS", según documentación de UNASUR a la que accedió la AFP, constituyeron sus prioridades en la Asamblea Mundial del organismo que concluyó este martes en Ginebra.
Creada en 2008, UNASUR puso en marcha un Consejo de Salud Suramericano compuesto por los ministros de Salud de sus 12 Estados miembros, cuya presidencia pro témpore es ejercida en 2011 por Uruguay, con la copresidencia de Paraguay.
UNASUR afirma que las Enfermedades Crónicas No Transmisibles como las cardiovasculares, respiratorias, renales, el cáncer y la diabetes son la principal causa de muerte a nivel mundial, cuyo 80% se producen en países de bajos y medianos ingresos, con un índice aun más alto en la región de UNASUR.
Los factores de riesgos de estas enfermedades son el tabaco, la dieta inadecuada, la inactividad física y el consumo nocivo de alcohol, que han generado una "epidemia de sobrepeso y obesidad, la elevada prevalencia de hipertensión arterial y de colesterol elevado", sostiene la documentación de UNASUR.
Para erradicar estos males UNASUR preconiza medidas que reduzcan "el sodio, los azúcares y las grasas trans en los alimentos procesados, incrementar el consumo de frutas y hortalizas y la actividad física, disminuir la ingesta calórica, mejorar la información disponible al consumidor".
Alienta también "proteger a los niños de la publicidad de alimentos no saludables, prohibir la publicidad, promoción y patrocinio del tabaco, implementar ambientes 100% libres de humo y promover la reducción del consumo nocivo de alcohol a través de políticas efectivas de reducción de acceso".
En cuanto a los "productos médicos de calidad subestándar, espurios, de etiquetado engañoso, falsificados o de imitación", UNASUR estima que llegó el momento de hacer lo mismo que se obtuvo contra el tabaco, es decir disponer de un instrumento vinculante, una convención que obligue a los países a limitar su impacto dañino en la población.
UNASUR considera, además, que "el descenso de la mortalidad neonatal no ha acompañado la velocidad de esta tendencia y se encuentra estancada" y se haya "lejos de alcanzar para el año 2015 la reducción del 75% a la que se comprometieron los países" del mundo en los denominados "Objetivos del Desarrollo del Milenio".
La resolución adoptada exhorta a los gobiernos a apoyar "soluciones innovadoras y las investigaciones centradas en las principales causas de mortalidad perinatal y neonatal, como la prematuridad, la septicemia, las patologías respiratorias y las infecciones, en particular las de origen nosocomial".
El llamado de UNASUR a una aplicación del Reglamento Sanitario Internacional vigente desde el 2005, apunta a reforzar los mecanismos de prevención que impidan los brotes de enfermedades y den a cada país la capacidad "de detectar, evaluar y notificar eventos que puedan ser potenciales emergencias de salud pública de importancia internacional".
UNASUR apoya el reclamo de todos los países de las Américas, nucleados en la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que recibe alrededor del 7% de los recursos de la OMS, para que se haga "un seguimiento" y se garantice le lleguen los fondos que les corresponden, tanto el porcentaje de las contribuciones regulares como el de las voluntarias, 18% y 82% respectivamente, del presupuesto de la OMS.
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