Rusia,puede detener los incendios forestales pero no lo combate

Rusia,puede detener los incendios forestales pero no lo combate

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En Rusia hay pertrechos y tecnologías especiales para combatir los incendios de cualquier intensidad. Están listos para su uso pero, por unas cuestiones o por otras, las autoridades no los emplean.

Según informa el periódico ruso Rossiyskaya Gazeta, hace algunos años se inventó en Rusia la primera bomba de aviación para extinguir incendios del mundo, la ASP-500. La bomba contiene casi media tonelada de una mezcla anti incendios y es capaz de apagar incluso las llamas de mayor tamaño. Los artefactos estaban diseñados para ser arrojados desde los aviones de carga o aviones de asalto y de caza sobre las zonas afectadas por incendios.

Las bombas anti incendios son absolutamente seguras para las personas. Explotan en el aire, dispersando la mezcla ignífuga sobre las llamas. Según precisa el periódico, con una buena organización, usándolas podrían combatir los incendios en Rusia mucho más rápidamente que con los métodos que se emplean actualmente. No obstante, las autoridades rusas hasta ahora no tomaron la decisión oficial sobre el uso de estos pertrechos. Supuestamente, surgieron algunas dudas sobre su efectividad y también sobre su construcción.

Otro diario ruso, Komsomolskaya Pravda, escribe sobre el proyecto ‘Urania’ que investiga el método para provocar lluvias artificialmente en los periodos de sequía. Para corregir las condiciones meteorológicas, se inventó un cañón especial. El mecanismo varía esas condiciones con un generador que produce fluctuaciones electromagnéticas de cierta forma y frecuencia. Esas fluctuaciones pueden formar nubosidad sobre una zona de sequía o de incendios.

La instalación se creó hace 20 años y ha sido puesta a prueba varias veces, pero hasta ahora no se ha usado de forma generalizada. Los expertos dicen que el cañón no puede producir milagros y causar lluvias rápidamente en cualquier lugar. Puede cambiar el tiempo en un plazo comprendido entre varias horas y hasta 10 días. Sin embargo, por ahora las autoridades no se deciden a usarlo porque temen que el nuevo invento pueda romper el equilibrio de la atmosfera terrestre.

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