El huracán Alex se fortificó, aumentó sus vientos máximos sostenidos a 155 kilómetros por hora y alcanzó categoría dos en la escala Saffir-Simpson -con máximo en cinco-, antes de su impacto en la costa noreste de México, informó el Centro estadounidense de Huracanes (NHC, por su sigla en inglés).
"Alex es ahora un huracán categoría dos tocará tierra muy pronto en el noreste de México", aseguró el NHC. Asimismo, el Centro de Huracanes auguró "un fortalecimiento adicional antes de que toque tierra".
Un informe presentado a las 23H00 GMT, registraba que el ojo del huracán se ubicaba a 90 km al noreste de la ciudad de La Pesca, en México, y a 170 kilómetros al sur de Brownsville, Texas (EE.UU.).
Por su parte, el meteorólogo del CNH Félix García, indicó que se espera que Alex toque tierra en las próximas horas.
"Las fuertes bandas externas del huracán llegaron hace más de dos horas a la zona y la pared externa del ojo arribará en pocas horas", declaró García.
Los especialista calificaron a Alex como un gran huracán, porque sus vientos con fuerza de ciclón se extienden a 110 kilómetros de su centro. Mientras que los vientos con fuerza de tormenta se extienden a 335 kilómetros.
La vorágine de Alex, primer huracán de la temporada que comenzó el pasado 1 de junio y se prevé que termine en noviembre, se encuentra cerca de la latitud 24,4 grados norte y de la longitud 97,2 grados oeste y bajó la velocidad de traslación a 19 kilómetros en dirección oeste.
Entretanto, el Gobierno de México, mantiene una alerta de tormenta tropical para el sur de la ciudad de La Cruz hasta Cabo Rojo (Puerto Rico). También emitió un aviso de huracán desde la desembocadura del Río Grande hasta La Cruz, en la costa mexicana.
Del mismo modo, para la costas del sur de Texas, está vigente una alerta de huracán, desde la bahía de Baffin hasta la desembocadura del Río Grande.
En el norteño estado mexicano de Tamaulipas, el Sistema Nacional de Protección Civil decretó alerta roja.
La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de EE.UU. (NOAA, por su sigla en inglés) pronosticó para la temporada: la formación de 14 a 23 tormentas y entre 8 a 14 huracanes, que se descargarían en Estados Unidos, el Caribe, Centroamérica y el Golfo de México.
La predicción de los meteorólogos indican que esta será una temporada "extremadamente activa", puesto que los huracanes pudieran ser muy intensos con vientos superiores a los 177 kilómetros por hora.
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